La pasada semana, con motivo de la UCI Marathon Series Roc d’Azur, (que se celebraba el viernes), nos fuimos con mi amigo y sherpa David, en un camping cerca de Frejús, epicentro del festival.
Estuvimos 4 días entrenando por la zona de la carrera y el Massíf de l’Estérel, lugar precioso y lleno de senderos rocosos, dónde este año, la falta de agua había dejado las zonas técnicas aún más ‘’entretenidas’’.
Personalmente, era mi primera participación en el Roc d’Azur y la primera vez que iba a esta zona de Francia, y me quede flipando. La zona es perfecta para la práctica del ciclismo, buen clima, carreteras tranquilas en esta época del año, buena comida, precios económicos para dormir y como no, playa.
Hablando del evento, es simplemente brutal. Se encuentra situado en un viejo aeródromo y de espacio van sobrados. Las carreras empiezan el jueves y terminan el domingo con la mítica Roc d’Azur, donde puedes encontrar muchos profesionales que van a terminar la temporada allí o a cumplir con las obligaciones de sus patrocinadores, ya que en la zona ‘’exposición’’ puedes encontrar un stand de casi todas las mejores marcas del mundo del ciclismo.
Por mi parte, el recorrido no me favorecía en nada, rápido y de doble. Si juntas eso y una de las parrillas con más nivel del año el puesto es solo un número. Estoy contento con la carrera que hice, sobretodo los 50km del medio dónde se juntaba casi todo el desnivel positivo. La salida fue desastrosa y el final me deshinche, así que perdí la motivación y a duras penas pude terminar el 66º.💥
Me llevo un buen recuerdo de esta semana y sobretodo mucha experiencia de cara al próximo año.
Decir que de vuelta a casa, intenté correr la Tramun, pero la cadena dijo basta al km 10, así que ahora toca aprovechar el buen tiempo para sumar km con amigos y disfrutar de la bici por mi zona de entrenamiento de toda la vida.
En diciembre, volvemos a subir a las montañas a por la temporada de invierno.⛰
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